miércoles, 9 de diciembre de 2009

¿GLAMOUR O CRUELDAD?

Echando la vista atrás, podemos recordar que las pieles de animales eran usadas en regiones cuyo clima era más frío, es decir, esta práctica era principalmente para el resguardo de los incidentes climáticos. Pero, ¿y en la actualidad?, ¿ésta práctica es meramente para prevenir posibles complicaciones en la salud o va más allá?

Efectivamente, hoy en día, la vestimenta elaborada con pieles está más relacionada con la industria de la moda y no con los incidentes climáticos que a tantos les preocupan o incluso afectan. Curiosamente, en Europa los países que generan más demanda de abrigos de piel son España, Italia y Grecia, los cuales gozan en gran parte de su territorio de los climas más cálidos de Europa. ¿Contradictorio no creen?

La industria de la moda, ha intentado establecer desde el principio un icono de glamour, elegancia y sofisticación, a través de esta práctica, ya que pretende venderlas como artículos de lujo. Contradictoriamente, pese a la sofisticación aparente, hace algunas décadas la concepción que la sociedad tenía de las pieles era todavía más acentuada, ya que estaban al alcance de menos personas y por ello eran un símbolo de alto estatus social. Pero actualmente lo que sí está al alcance de toda la sociedad es la información, por lo cual llevar abrigo de piel debe ser considerado un síntoma de frivolidad, vanidad y sobre todo de ignorancia.


Hoy en día , existen multitud de técnicas y diversas alternativas sintéticas elaboradas con poliéster que consiguen imitaciones casi perfectas de la piel natural.

Gracias a la divulgación de la información ha aumentado la conciencia colectiva respecto al uso de pieles. Por ello, la demanda del abrigo de piel clásico ha bajado, especialmente entre los más jóvenes. Pero en realidad, seguimos siendo consumidores de estas pieles ya que la mayoría se encuentran en los retoques y adornos de los abrigos, sobre todo en cuellos, puños y capuchas, guantes o bufandas elaborados tambien con tejidos sintéticos. Pero lo que no sabemos es que este tipo de piel (principalmente conejo) es la más común en firmas de ropa juvenil y como sus precios son asequibles incitan al consumidor a comprar, ya que el primer pensamiento es "no se trata de piel natural"


A pesar que la ley obliga a etiquetar todos los productos indicando toda su composición, desafortunadamente la información de las etiquetas no siempre es fiable o no está completa, especialmente cuando el país de origen del producto es China.

Actualmente existen a nivel mundial multitud de organizaciones, campañas y manifestaciones en contra de esta práctica. La más conocida o la más inquietante es la que concentra centenares de activistas en las principales plazas de las grandes ciudades como Madrid o Barcelona.



¿Regresa la moda de la ostentación en la que las pieles tienen de nuevo cabida?
¿Conseguirán instaurarse estas modas de nuevo en una sociedad que trata de concienciarse con las ideologías ecologistas?



FDO: Patricia Ortiz

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